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Antes de visitar Tournai, descubre su historia. La ciudad de los cinco campanarios, nombre heredado de las cinco torres de su Catedral, es la única ciudad belga que estuvo bajo la dominación inglesa durante algunos años. Enrique VIII ordenó la construcción de una ciudadela, de la que todavía son visibles algunas partes.

#Folclore  #Patrimonio #EnPareja

Tournai es una de las ciudades más antiguas de Bélgica, y su patrimonio ofrece muchos restos de una historia milenaria. Cuando vengas y te preguntes qué ver en Tournai, contempla el más antiguo campanario de Bélgica así como la Catedral de Notre-Dame, herencias de la época medieval declaradas en la lista de la UNESCO. Tampoco te pierdas el halle aux draps y, más recientes, las numerosas construcciones de estilo Art Nouveau que se encuentran en las calles. Entre ellas, el Museo de las Bellas Artes fue diseñado por Victor Horta.

Pero Tournai también se visita paseando, dependiendo de si te apetece y del tiempo que haga. ¿Nuestra sugerencia? Hazte con el juego a la venta en la Oficina de Turismo y en el Albergue de Juventud. Propone un circuito que tiene como misión: ¡liberar a la ciudad de una maldición! El juego contiene varios utensilios necesarios para vivir esta aventura. También es una ocasión para ver la estatua Martine y su perro Patapouf, la joven heroína diseñada por Marcel Marlier.

Tournai te seducirá con su folclore y sus tradiciones particularmente ancladas en la vida de sus habitantes. Entre ellas, el «Lunes perdido», sin duda menos conocido que el carnaval, es una de las fechas más importantes en la vida de los habitantes de Tournai. Ese día la tradición sirve el «conejo del Lunes Perdido». Si te gusta divertirte, no te pierdas el carnaval y sus gigantes o la gran procesión, y las dos ferias de atracciones.